6 maneras diferentes para quemar calorías
Quemar más calorías puede ayudarte a perder y mantener un peso saludable. Hacer ejercicio y comer los alimentos correctos son 2 formas efectivas de lograrlo. Pero, también puedes aumentar la cantidad de calorías que quemas de maneras menos convencionales.
Aquí te sugerimos 6 formas diferentes de quemar calorías:
1. Exposición al frío
La exposición a temperaturas frías puede ayudarte a subir tu tasa metabólica al estimular la actividad de la grasa parda en tu cuerpo (1). Si bien las reservas de grasa están compuestas principalmente por grasa blanca, también incluyen pequeñas cantidades de grasa parda. Estos 2 tipos de grasa corporal tienen diferentes funciones:
- La función principal de la grasa blanca es el almacenamiento de energía. Tener demasiado tejido graso blanco puede promover la inflamación y la resistencia a la insulina.
- En contraste, la función principal de la grasa parda es mantener el calor corporal durante la exposición al frío (2, 3).
Se ha demostrado que el efecto de quemar calorías de la grasa parda varía entre los individuos. En general, las personas obesas parecen tener menos grasa parda activa que las personas de peso normal (4).
Según estudios realizados en animales, se cree que la exposición crónica al frío conduce al pardeamiento de la grasa blanca (5). Los estudios en humanos indican que la exposición a temperaturas frías puede aumentar significativamente la quema de calorías. Ésto, dependiendo de la cantidad de grasa parda activa en tu cuerpo (6, 7, 8, 9, 10, 11).
No necesitas soportar temperaturas súper extremas para obtener este beneficio.
En un estudio, hombres jóvenes sanos con fisonomías similares permanecieron a 19 ° C durante 2 horas. Aunque la quema de calorías aumentó en todos ellos, el efecto se triplicó en aquellos con la mayor actividad de grasa parda (10).
En otro estudio en 10 hombres jóvenes y delgados, la exposición a una temperatura de 17 ° C durante 2 horas llevó a un promedio adicional de 164 calorías quemadas por día (11).
Existen varias formas de obtener los beneficios de la exposición al frío. Entre ellas, reducir ligeramente la temperatura en tu casa, tomar duchas frías y caminar afuera cuando hace frío. Sólo ten cuidado de no exagerar en esta práctica para evitar contraer gripe.
RESUMEN
Se ha demostrado que la exposición a temperaturas frías estimula la actividad de la grasa parda. Esto significa que incrementa la cantidad de calorías que quema.
2. Beber agua fría.
El agua es la mejor opción de bebida para calmar la sed y mantenerse hidratado.
También se ha demostrado que el agua potable estimula temporalmente el metabolismo en adultos y niños con pesos normales y con sobrepeso. Algunos estudios incluso sugieren que puede maximizar este efecto si se bebe agua fría (12, 13, 14, 15, 16).
Un grupo de investigadores reportó que el 40% de este incremento en la tasa metabólica se debe a que su cuerpo calienta el agua a la temperatura corporal (15).
Dos estudios en adultos jóvenes encontraron que beber 500 ml de agua fría aumentaba la quema de calorías en un 24-30% durante 90 minutos (15, 16). Sin embargo, el estudio fue bastante pequeño e investigaciones adicionales sugieren que el efecto del agua en la tasa metabólica puede variar de una persona a otra.
Por ejemplo, otro estudio en adultos jóvenes sanos observó que beber 500 ml de agua fría ayudaba a quemar calorías a una tasa del 4.5% durante 60 minutos (17).
RESUMEN
Se ha demostrado que beber agua fría ayuda a quemar calorías al menos temporalmente. Aún así, la fuerza de este efecto puede variar según el individuo.
3. Masticar chicle
Se ha demostrado que el chicle promueve la sensación de saciedad y reduce la ingesta de calorías durante la merienda (18). Algunas evidencias sugieren que también puede ayudar a acelerar su metabolismo (19, 20, 21, 22).
En un pequeño estudio, varios hombres de peso normal consumieron comidas en cuatro ocasiones diferentes. Quemaron significativamente más calorías en las comidas en las que habían mascado chicle tras comer (20).
En otro estudio en 30 adultos jóvenes, masticar chicle durante 20 minutos después de cada comida aumentó su tasa metabólica, en comparación con no masticar chicle. Además, la tasa se mantuvo más alta después de un ayuno nocturno (21).
Si deseas probar este método, asegúrate de elegir un chicle libre de azúcar para proteger tu salud dental.
RESUMEN
El chicle parece incrementar la tasa metabólica cuando se mastica después o entre las comidas. Asegúrate de elegir chicles sin azúcar para evitar las caries.
4. Donar sangre
La extracción de sangre ayuda a quemar calorías, al menos temporalmente.
Cuando donas sangre, tu cuerpo usa energía para sintetizar nuevas proteínas, glóbulos rojos y otros componentes de la sangre para reemplazar lo que se ha perdido. Por supuesto, donar sangre no es algo que puedas hacer todos los días. En general, debes esperar al menos ocho semanas entre extracciones de sangre para reponer tu suministro de sangre.
Además, las investigaciones sugieren que donar sangre puede ofrecer varios beneficios para la salud. Por ejemplo: reducir los marcadores inflamatorios, aumentar la actividad antioxidante y reducir el riesgo de enfermedad cardíaca (23, 24).
Y lo que es más importante: cuando donas sangre, puedes salvar vidas.
RESUMEN
Además de ayudar a salvar vidas, la donación de sangre tiene otros beneficios. Por ejemplo, aumenta temporalmente la cantidad de calorías que quemas y proporciona otros beneficios para la salud.
5. “Inquiétate” más
Puedes quemar calorías mediante el ejercicio y, aparte, te ayuda a mantenerte en forma.
Sin embargo, las formas más sutiles de actividad física también pueden aumentar tu tasa metabólica. Este concepto se conoce como termogénesis de actividad sin ejercicio (NEAT, por su significado en Inglés), que incluye movimientos de inquietud (25).
Los movimientos de inquietud consisten en mover partes del cuerpo de manera inquieta pero consciente. Por ejemplo: golpear repetidamente una pierna, tocar los dedos en una mesa y jugar con los anillos.
En un estudio, se demostró que las personas que se movían así mientras estaban sentadas o de pie quemaban de 5 a seis 6 más calorías, en promedio, que cuando se sentaban o estaban quietas (26).
Otro estudio encontró que las personas con el mayor peso corporal experimentaron el mayor aumento de la tasa metabólica en respuesta a la inquietud y otros tipos de actividad sin ejercicio (27).
En algunos casos, NEAT puede hacer una contribución significativa a la cantidad de calorías que quema cada día.
Por ejemplo, un grupo de investigadores sugirió que una combinación de inquietud, caminar y pararse podría quemar hasta 2,000 calorías adicionales por día, según el peso de la persona y el nivel de actividad (28).
Debido a que la inquietud puede ayudarte a quemar calorías y prevenir el aumento de peso, algunos expertos están pidiendo que las personas incorporen la inquietud y otras formas de actividad sin ejercicio en sus vidas diarias (29, 30).
Otras formas de beneficiarse de NEAT incluyen subir las escaleras, usar un escritorio de pie y limpiar.
RESUMEN
Se ha demostrado que la inquietud aumenta la cantidad de calorías quemadas mientras estás sentado y de pie. Ésto, especialmente en aquellos con sobrepeso.
6. Reírse a menudo
A menudo, se dice que la risa es la mejor medicina.
De hecho, varias investigaciones han confirmado que la risa puede mejorar muchos aspectos de la salud mental y física. Por ejemplo: la memoria, el sistema inmunológico y la función arterial (31, 32, 33).
Además, la risa también quema calorías.
En un estudio, 45 parejas vieron películas que eran humorísticas o serias. Cuando se rieron durante las películas divertidas, su tasa metabólica aumentó en un 10-20% (34).
Aunque no es mucho, reírse frecuentemente es una excelente manera de mejorar tu salud general y hacerte más feliz.
RESUMEN
Los estudios sugieren que la risa causa un ligero aumento en la tasa metabólica. Además, puede mejorar su salud general y aumentar su calidad de vida.
En conclusión
Tu tasa metabólica determina la cantidad de calorías que quemas cada día.
Varios factores afectan tu tasa metabólica. Al hacer cambios simples en tu vida diaria, podrías aumentar esta tasa ayudándote a quemar más calorías y perder peso.
Estos incluyen los movimientos de inquietud, beber mucha agua fría, reír más a menudo, masticar chicle y donar sangre.
Si bien la efectividad de estas estrategias de pérdida de peso parecen insustanciales, a la larga podrían marcar una diferencia. Lo peor que puede pasar es que no las pruebes.
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